SERIGRAFÍA FINA CON: HOLA POR QUÉ

TaquenXRopegun

Hola Eduardo ´Vicius´, ¿te parece bien ser quien inaugure esta serie de entrevistas? A mi me parece lo más apropiado, es más, empiezo a pensar de nosotros lo mismo que el refrán ese del huevo y la gallina. En fin, por hablar de todo un poco, he leído que la serigrafía es una técnica de estampación milenaria y está considerada un arte como tal. Si crees que sí, ¿Por qué hay que conservar artes milenarias si nuestro modelo de producción se basa en todo lo contrario: maquinas, digitalización, inmediatez, beneficio frente a calidad, explotación, etc. etc. etc.

¿Cuánto tiempo tengo? En los milenios anteriores era más arte, ahora es una mera técnica sustituida casi toda por la impresión digital. Pero siempre hay reductos galos. Cuando nosotros empezamos en la serigrafía a finales del siglo XX, el mismo siglo en el que se inventó el muro de Berlín, nos costó muchísimo encontrar proveedores de materiales de serigrafía, porque estaba todo orientado a la serigrafía industrial, es decir, nada de arte, todo para grandes producciones, camisetas publicitarias de usar y tirar y movidas de esas. Claro que también había un mundo de la serigrafía orientado al arte, más a la reproducción de obra gráfica, y eso sigue existiendo. Y también fuera de este país desde el que escribo, que no diré el nombre para que no me relacionen con él, la cultura serigráfica es mucho mayor. Las tintas y materiales menos agresivos con el medio ambiente están más desarrollados, porque en general en otros países europeos también hay más cultura a secas.

En todos los años que llevamos Hola Por Qué hemos visto crecer mucho el mundo de las camisetas y también la gente que se estampa en casa sus propias prendas, que es como empezamos nosotros. Así que si hay demanda hay oferta, y ahora es más fácil encontrar proveedores, pero también, y ahí enlazo con la segunda parte, que segundas partes nunca fueron buenas y esto es un ejemplo, también abundan las cosas cutres. No me refiero a la forma de reproducir, nosotros empezamos estampando tirados en el suelo en el hueco entre la cama y el armario, sino a la calidad de las tintas o de los textiles. Y es que el capitalismo salvaje llega a todos lados. Es importante hacer las cosas bien y con materiales de buena calidad, da igual que sean cosas milenarias o comarcales. En la prehistoria del Hola Por Qué empezamos haciendo camisetas sólo para nosotros mismos, lo que quiere decir que nos interesaba que durasen lo máximo posible. No buscábamos tampoco enriquecernos, era más importante que las cosas estuvieran bien hechas, aunque vendiéramos menos. Cuando te dedicas a producir a lo loco lo que pasa es que el planeta se destruye a lo loco también. Si los árboles crecen despacio y los destruyes rápido no es sostenible. Hay que destruirles despacio, jajaja. Fuera broma, no los destruyas, hombre. Hay que cuidar todo. ¿Qué quieres, hacer camisetas bien hechas o sólo vender cosas, da igual qué cosas y da igual cómo estén hechas y cómo se hagan? Antes de conocer la serigrafía yo me hacía las camisetas con un pincelito, cuando estaba en el insti, y tardaba días en hacerme una. Luego descubrí la seri y menuda maravilla ¡me hacía unas cuantas en una sola tarde! La inmediatez no es el problema. Si tienes muchas ideas es mejor producirlas rápido para sacar cuantas más ideas mejor, pero eso es expresión, no mercado. Una máquina automática sólo es una herramienta más que te permite trabajar más rápido. Pero hay que vigilar los materiales y controlar que estás haciendo bien las cosas y con calidad, no hacer cosas que no duren y buscando solamente un lucro indecente.

Por otro lado está el proceso, la artesanía, disfrutar con el trabajo, trabajar en algo que te guste y poderte divertir, como canta Distorsión. Dar a un botón es fácil, hay que saber usar la máquina y todo eso, pero puede ser aburrido sólo mirar. Lo veo más cómo algo técnico, mientras que algo artesanal me parece más una forma de expresión porque involucras directamente al cuerpo y trabajas directamente junto al soporte. La artesanía nunca va a poder ser competitiva frente a la industria que sólo busca beneficios, pero el capitalismo salvaje no va poder competir nunca frente a la vida, aunque acabe ganando. Si encima nos metemos en explotación, derechos laborales, destrucción de ecosistemas y todas esas mierdas pues qué quieres que te diga. ¿Cómo discutir con alguien que defiende esas cositas? Que ya te digo yo que a la mayoría de la gente le importa un pepino todo eso de la Naturaleza, que prefiere ropa barata para ir mona, estaciones de metro en vez de árboles para andar menos y tirar colillas al suelo o fabricar armas para crear puestos de trabajo.

La artesanía nunca va a desaparecer, siempre va a haber alguien dibujando con un lápiz por mucho que avancen las pantallas táctiles y los pluggins del Photoshop.

Con tu permiso, voy a meterme, solo un poco, en tus sentimientos mas profundos. ¿Qué valoras de la gente con la que trabajas? me refiero a quienes, como yo, quieren que le estampes cosas.

Valoro que valoren mis valores. Tampoco nada del otro mundo: calidad, durabilidad, pasión, justicia social… Lo que debería ser del otro mundo es lo contrario, pero al final los malos nos han comido el terreno.

De las gentes para las que trabajamos, las dos más importantes nos representan. Una es Greenpeace, con quienes llevamos trabajando desde el 2003, prácticamente nuestros primeros clientes y muy responsables de que acabáramos montando el taller, y Ropegun, que empezaste más tarde pero ya hemos celebrado el sexto aniversario, así que encantado de la vida. Esta la he hecho corta para compensar.

A demás de nuestra relación estampación – montañas, creo no equivocarme al afirmar que la música es también un pilar importante en nuestra relación así que, ¿me dices una canción que te pongas los pelos como escarpias, una que te haga hervir la sangre y una última que te haga seguir confiando en la raza humana?

O sea, tres canciones. Ay, no sabría cuál decir, no vaya a ser que los otros cienes de grupos que escucho se pongan celosos. Los pelos como escarpias, si decimos una así bonita y emocionante, pues unas cuantas de Saez, que es uno de mis últimos descubrimientos preferidos de hace unos años. Relacionada con las anteriores respuestas: J’accuse («el hombre no desciende del mono, desciende de la oveja»). Y otras: Les cours des lycées («él ve la vida de todo su pueblo yendo directo al matadero»), Tous les gamins du monde (lapiceros contra balas) o del penúltimo disco Germaine, que esta sí me pone los pelos muy de punta. Esta de las cuatro.

De la sangre el ‘Never mind the bollocks’ de los Sex Pistols entero y de canción ‘Delicuencia’ de La Polla Records. Una vez que vino una coach al Hola Por Qué que nos ayudó mucho nos dijo que escogiéramos algo que nos representara y yo dije que yo era una canción de gritar, y que era esa canción, ‘Delincuencia’.

No confío en mi especie humana para nada. Quiero apostatar. En esa ingenuidad es en lo único que discrepo de mi superhéroe favorito William Morrris. Yo trabajo cada día en mejorar el mundo con lo que estampo, escribo, dibujo y canto, disfrutando con mi trabajo, buscando causar el menor impacto posible en el planeta, pero soy colapsista y sé que todo lo que hago es en vano y que ya no hay salida. Pero no voy a dejar de hacerlo. Sobre la esperanza hay una canción también de Saez que dice Si crees que todavía podemos salvar esta estrella, podemos salvar esta estrella.

¿Para que añadir más? Gracias amigo.